¿Por qué si soy tan buena
onda no están ahora mis amigos?
Sé cómo te sientes, también
yo he pasado por allí. Una de las cosas
que me ayudaron a abrir la puerta nuevamente y enfrentarme al mundo, a salir de
mi duro caparazón fue, primero, creer en mí misma, verme valiosa, luego buscar algo bueno que hacer, aunque te confieso que tenía
miedo porque no conocía lo que me esperaba, traté de relacionarme con gente a
través del deporte en mi escuela, la música, las reuniones de jóvenes y
adolescentes en la iglesia, visitando un
vecino, ayudando a alguien que necesitaba un favor o a quien yo podía enseñar a
hacer algo, escribiendo cartas o llamando por teléfono a un amigo o amiga.
No
te niego que también hubo ocasiones que busqué cosas o personas que no eran buenas y que me dejaron
amargo dolor.
Tal vez no es una puerta
física que cierras sino que cierras tu corazón, y no permites que nadie entre aunque
estés rodeado de gente. Hay un amigo,
que aunque no es de carne y hueso, puede
llenar ese vacío y soledad más que ninguno, es Jesús, el Hijo de Dios, si le
abres esa puerta, puede darle un nuevo sentido a toda tu vida. Sólo habla con
él en voz alta y dile que te ayude en este mismo momento.
Hasta la próxima!!! Vendré a
visitarte, y más vale que me abras la puerta, jaja!!
Por Mery Bracho
imagen cortesía de Ayhan YILDIZ
La Soledad en adolescentes, Mala Compañía. Consejos para jovenes, adolescentes, notas, reflexiones cristianas acerca de la soledad, la depresión. Postales cristianas de abre puerta corazón, no molestar para compartir por facebook.